Los cinturones para la espalda son herramientas críticas que ayudan a proteger tu espalda al levantar objetos pesados. Pueden proporcionarte soporte y ayudarte a evitar lesiones. Dicho esto, a continuación te damos algunos consejos para usar correctamente un cinturón de espalda para que puedas estar seguro y fuerte.
Usar un cinturón de espalda te brindará soporte muscular en la espalda y mantendrá tu columna vertebral en la posición adecuada. Esto puede aliviar la tensión en tu espalda al levantar objetos pesados. Los cinturones de espalda también pueden servir como recordatorio para practicar técnicas adecuadas de levantamiento, incluyendo doblar las rodillas y mantener la espalda recta.
Para que tu cinturón de espalda funcione eficazmente, debes asegurarte de que te quede bien. Afloja las correas para que el cinturón esté ajustado pero no tanto como para asfixiarte. Asegúrate de que el soporte lumbar esté centrado en la parte baja de la espalda. Asegúrate de que esté derecho y no torcido cuando lo lleves puesto. Siempre levanta con las piernas, no con la espalda, insisten los expertos — incluso cuando uses un cinturón de espalda.
el aparato de apoyo para la espalda puede prevenir lesiones en la espalda mientras levantas cajas en casa o juegas deportes en la escuela. Puede ofrecer soporte adicional y recordarte mantener una buena postura. Siempre asegúrate de calentar tus músculos antes de realizar cualquier tipo de actividad física y descansa tu espalda periódicamente.
Aunque los tipos de fajas para la espalda son muchos, tienes que elegir la adecuada para ti. Considera cómo usarás la faja y qué grado de soporte necesitas. Algunas fajas son más adecuadas para levantar pesados que, por ejemplo, para uso casual. Querrás probarte diferentes fajas para asegurarte de obtener una que te quede mejor.
Asegúrate de lavar tu faja según las instrucciones si deseas mantenerla en buen estado. Guárdala en un lugar fresco y seco y no la expongas al calor o al sol durante largos períodos de tiempo. Inspecciona la faja para detectar algún daño, como deshilachado o estiramiento. Si notas signos de desgaste, es hora de reemplazarla inmediatamente.